viernes, 4 de junio de 2010

Cuando el destino nos alcance







Por Carlos Vicente Torrealba

La tercera guerra mundial no es por petróleo, ni uranio, será por el agua y esta ya ha comenzado.


Las grandes potencias del mundo como el gobierno de los EEUU se han planteado no solo el dominio ideológico, para ellos el mas importante es el energético petrolero y estos nos lo han vendido de un modo indirecto; pero todo hace pensar que detrás del petrolero, que es un recurso no renovable pero si remplazable, esta uno mas poderoso y que dependerá el futuro de ellos mismo y de todos como especie y es el agua, y hay un hecho que revela esa verdadera intención, ya que para el ejercito de EEUU fue mas importante que tomar los posos petroleros en Irak, tomar las márgenes del Eufrates y el Tigris, territorio que han asegurado desde el primer momento desde la “operación tormenta del desierto”.

Nuestra mente ingenuamente le cuesta pensar, sobretodo cuando en Venezuela esta dividida por uno de los ríos más grande del mundo como el Orinoco, o en nuestra región que es la única que posee las dos cuenca hidrográfica clasificadas por los especialistas mundiales como geoestratégica, como la del Caura y la del Caroní. Además que la demanda de agua dulce a nivel mundial aumenta cada día más y en forma potencial. Ingenuamente pensamos que el agua esta allí y gastamos casi o mas de 300 litros de ella cada vez que tomamos una simple ducha de unos quince minutos; pero hoy hay mil quinientos (1.500) millones de personas en el mundo que no poseen ese lujo de darse una ducha, y es la inoperante ONU, quien en un dramático informe salido del Consejo de Seguridad y poco divulgado que ha afirmado que para el año 2025 la demanda de agua potable será el 56% mas que el suministro, eso es peor que Hiroshima y Nagasaki o la actual guerra de ocupación en Irak.

Venezuela es un país geoestratégico que apenas se encuentra por debajo de Brasil y China en volumen de agua pero es el único país del mundo que posee una cuenca hidrográfica, hasta hoy pura y de alta calidad, como la del Caura, otra como la del Caroní que posee cuatro represa en un mismo río y produce energía limpia y ahorrándole a la nación quinientos (500) mil barriles diarios de petróleo.

Es por tanto ilógico que más de 70 mil mineros destruyan nuestras cuencas del Caroní en detrimento de casi 30 millones de personas y por supuesto nuestro futuro, o las espantosas invasiones de nuevos mineros a la reserva más importante y geoestratégica de nuestra nación como es la del río Caura.

Las cifras suministrada por una prestigiosa firma internacional y ratificada por otras empresas nacionales nos señalan que el 45,25% de los depredadores ambientales son brasileros; 28,75% colombianos; 5.45% peruanos; 4,25 % ecuatorianos; 3,21% dominicanos; 3,84% de otras nacionalidades, y tan sólo 9,25% son venezolanos. Para tener una idea de la importancia de nuestras cuencas, pensemos lo siguiente: si desaguáramos en 100 vasos toda el agua que contiene nuestro planeta tierra, tendríamos, dos (2) vasos de agua congelada; noventa y siete (97) vasos de agua salada, y escasamente un vaso agua dulce, y que, de ese vaso de agua dulce una venteaba parte de alta calidad y sin contaminación severa que ¡por ahora! se encuentra en Venezuela, siendo la mas pura del mundo la que se encuentra en la cuenca del Caura ¡Si la cuenca del Caura! Donde están hoy depredadores brasileros, colombianos y un grupo de peones venezolanos como esclavos, destrozando el medio ambiente. La pregunta es simple ¿Quién defiende nuestra cuenca y nuestro futuro?

El agua dulce es, por mucho, la principal fuente de abastecimiento que tiene el ser humano: de las 6.500 millones de personas que habitan el planeta, 21 % carecen de agua potable. Todos los días 10.000 niños menores de cinco años mueren en países del Tercer Mundo como resultado de enfermedades contraídas debido al consumo de agua contaminada, la mayoría de las muertes de los niños en las zonas mineras del estado Bolívar es por la contaminación de mercurio y se a estimado que un 30% de las enfermedades atendidas en los principales centros del estado Bolívar están relacionada con la contaminación minera.

Hasta ahora sabemos la importancia de las dos cuencas hidrográfica en el estado Bolívar como son el Caura y el Caroní, señaladas como geoestratégicas, no conocemos en profundidad ni el propio ministerio del Ambiente sobre la magnitud de la importancia de estas cuencas subterráneas que existen en la región, pero podemos imaginar por que el gobierno de los EEUU cada vez que habla de terrorismo, ya sea en la Triple Frontera conformado por Argentina, Brasil y Paraguay, donde se encuentra la catarata de Iguazú y el Sistema Acuífero Guaraní, una de las mas importantes reservas de agua subterránea del continente. Hasta esa manía depresiva de señalar que en el Estado Bolívar, en Venezuela, es suplidor de uranio para Irán ¿qué raro que no señalen otra región de Venezuela sino justo sea nuestras cuencas hidrográficas en Guayana? Particularmente no creo que sea casual que la mayoría de las bases militares de EE.UU. en otros países se instalen cerca de las principales reservas de agua del mundo.

La lógica es simple: si EEUU necesita agua o la comprará vía las privatizaciones que está tratando de imponer en todo el mundo, o invadirá, mas tarde o mas temprano los territorios que necesita, buscando algún pretexto de ocasión como lo fueron las inexistentes armas químicas de Irak.

Por eso no debemos dejar que el agua sea considerada una mercancía y los recursos hídricos del planeta sean gestionados según el modelo del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, gracias al cual hoy 30.000 personas mueren cada día por enfermedades debidas a la falta de agua potable y de servicios sanitarios.

La mitad de los humedales han desaparecido en los últimos 20 años en la cuenca del Caroni, algunas pequeñas quebradas y riachuelos ya no existen y 50% del agua en Guayana está en serio peligro, y tenemos que decidir… o es el oro y el diamante que benefician a un grupúsculo de depredadores, o el agua para fortalecer y que puedan vivir 30 millones de venezolanos. Hoy nuestro futuro esta en juego, no podemos permitir que la minería que es una minoría este encima de la mayoría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario